Bajo el título la comunicación NoViolenta en el trabajo, Mar Madrid y Marta Delgado, expertas en comunicación, consultoria de empresas y gestión de conflictos, nos proponen una manera colaborativa de pensar, relacionarnos y, sobre todo de comunicarnos, donde los desacuerdos puedan ser resueltos de forma saludable. En concreto, en los entornos laborales este método se traducirá en cohesión, sentimiento de pertenencia y, a la larga en productividad. Pues una comunicación colaborativa es fundamental para que el trabajo salga adelante de la manera más eficaz posible.
“No olvidemos que la comunicación es, nada más y nada menos, que el elemento de unión entre los seres humanos. Es el pegamento”. “Cuando tienes una comunicación eficaz, generas atracción, unión. Por el contrario, cuando tienes una comunicación distorsionada, ineficaz, las personas se alejan, se cierran y se es más proclive al conflicto”.
Se trata de un enfoque que tiene en cuenta a las personas, genera bienestar y, por lo tanto promueve un deseo genuino de contribución en cualquier entorno organizacional. Un libro, fundamentalmente práctico, por el que a través de sus capítulos encontraremos numerosos ejemplos de cómo crear equipos de trabajo donde reine la cooperación y la confianza, entre otros atributos tan necesarios para afrontar los desafíos a los que el día a día laboral nos enfrenta.
La comunicación colaborativa o más conocida como Comunicación NoViolenta (CNV) se caracteriza, fundamentalmente, por buscar la conexión y colaboración entre las personas, sobre todo cuando hay dificultades o situaciones de desencuentro y conflicto. De ahí, la importancia de aplicarla en los entornos laborales, pues el propio trabajo y la relación con las personas te van a poner dificultades en el día a día.
Sin duda, cuanto mayor sea la cohesión, la sintonía en el equipo de trabajo, más fácil será afrontar los conflictos, tanto internos como los que provienen del exterior (clientes, proveedores, etc.)
No olvidemos que la comunicación es, nada más y nada menos, que el elemento de unión más importante con el que contamos los seres humanos. Es el pegamento. Cuando tienes una comunicación eficaz, generas atracción, unión. Por el contrario, cuando el diálogo es distorsionado, ineficaz, las personas se alejan, se cierran y se es más proclive al conflicto. Una buena comunicación es fundamental para que el trabajo salga adelante de la manera más productiva posible.
Cuanta mayor sea la conexión, más eficacia habrá en el desempeño de las labores profesionales: más facilidad y fluidez, más compartir y más cooperación. Aspectos todos ellos que generarán un deseo genuino de contribuir con los compañeros y, por consiguiente, con la organización. De este modo, el sentimiento de pertenencia tan valorado en la actualidad, también aumentará considerablemente.
En mi experiencia, desafortunadamente, conflictividad, frustración y desapego. En general, se da más una comunicación que aboca al desencuentro. Por ejemplo, sucede con frecuencia que, aparentemente, parece que no hay conflicto porque no se ve (no estalla), pero la realidad es que está ahí y, aunque no estalle tiene sus consecuencias. Esto suele ocurrir cuando las personas se aguantan y se callan, pero,igualmente, hay sufrimiento. En definitiva, si hay conflicto soterrado, o no, la eficacia en el trabajo disminuirá notablemente.
En mi opinión, varios factores propician la falta de entendimiento….
Hay que decir que con el teletrabajo se pierde la comunicación no verbal con lo que se genera desapego y desunión. Cuando estamos detrás de una pantalla, por ejemplo, disminuimos el tiempo de interacción: ya que no tomamos el café, no nos encontramos en el pasillo, ni en el ascensor y eso nos perjudica en cuanto a conexión y unión.
Por lo que es necesario crear espacios que inviten a sentirnos dentro de ecosistemas donde se nos valora y tiene en cuenta, por ejemplo:
Es importante decir, está avalado por numerosas investigaciones, que si existe un conflicto se hace necesaria la presencialidad. Es muy difícil resolver los problemas a través de mensajes o mails porque se pierde el tono, la interacción directa, pierdes algo tan importante como la comunicación gestual y emocional…La presencialidad a la hora del diálogo es de vital importancia.